¿Oposiciones?

  Mis padres siempre me decían: estudia para maestro. La tranquilidad de un sueldo mensual y la leyenda de tres meses de vacaciones calaban en el deseo de mis padres para el futuro de su hijo. Después fue la palabra ‘oposiciones’ la que se instauró en la mente de quién buscaban un futuro seguro. Y hoy, ante la crisis, vemos que esta palabra rebrota con más fuerza.

Como he dicho el empleo público sufrirá también la crisis, sin ir más lejos el Gobierno Nacional aprobó en febrero la oferta de empleo público con la convocatoria de 20.613 plazas, lo que supone un recorte del 48% con respecto a 2008. Y en las administraciones autonómicas un tanto de los mismo.

Entonces, miremoslo con visión de futuro. Hasta ahora una de las ramas más demandas eran las sanitarias, en especial: enfermería. En la oferta de Empleo Público de 2008, el Servicio Murciano de Salud ofertó 4270 plazas y este año no hay oferta. Era la primera vez, aunque hay que reconocer que la transferencia de la sanidad en Murcia ha sido reciente. No obstante, el aumento de plazas no lleva la misma medida que el aumento de estudiantes en la rama de las sanitarias. A corto plazo una enfermera encontraba trabajo nada más terminar la carrera, la previsión para quienes empiecen en este año no resulta tan halagüeña. Basta observar los datos: «Fuentes del Servicio Murciano de Salud aseguran que la cifra de solicitudes para las 4.260 plazas ofertadas en todas las categorías puede llegar a rondar las 80.000» (laopiniondemurcia.es).

Una caso parecido ocurre con las oposiciones a primaria. Todo opositor de la CCAA de Murcia espera que las oposiciones a Primaría y a Secundaría se intercalen, un año una y al siguiente la otra. Nadie obliga a que sea así, de hecho, no hay ley que obligue a convocar las oposiciones; pero habitualmente ha sucedido. Este año se ofertaron 1510 plazas al cuerpo de Maestro de Primaria y se presentaron 6.908 opositores. En 2007, fueron 1.487 las plazas ofertadas y 5.235 los opositores. Las cuentas son sencillas: a un incremento del 1% en las plazas se ha producido un incremento del 32% en los opositores.

Por tanto, ¿debemos pensar en la carrera que estudiaremos con miras a presentarnos a unas oposiciones? Esta pregunta deberían planteársela todos cuantos no ven más solución para saltar la crisis que prepararse una oposiciones. Si ya has terminado posiblemente no te quede otra opción, pero si estás empezando a estudiar mira con vistas a la salida de la crisis y busca una rama donde el empleo público no sea la única salida, o, en su defecto, que el número de opositores que luchen por tu misma plaza sea lo más reducido posible.