No puedo opinar sobre el titular, pues no pertenezco al entorno universitario público; sin embargo, la lectura del artículo La comunidad académica juzga poco eficaz el modelo de contratación, me trae a la memoria conversaciones con compañeros de la pública.
Los expertos aseguran que el sistema está lastrado por el proteccionismo, la burocracia y la poca agilidad
A veces resulta difícil evitar los feudos, y, aunque en la comunidad académica el intelecto debería erradicar los comportamientos más primitivos, estos están. ¿Seríamos mejores si cambiamos el sistema? No creo. No es el sistema lo que falla, es la educación. Por mucho que cambies el sistema, si quien accede a los puestos de responsabilidad termina cayendo en el mismo pensamiento seguiremos igual. Por desgracia, es lo que ha ocurrido desde hace mucho tiempo. El refranero español lo dice con sabiduría: el mismo perro con distinto collar.
Sí tengo una opinión sobre el párrafo que habla de la ANECA:
En cuanto a la ANECA, considera que está formada «por profesores jueces a tiempo parcial. Tiene sólo criterios burocráticos, casi mide los trabajos al peso. No entra en los contenidos. Sigue lo que dicen revistas supuestamente prestigiosas. Ahí se evalúa para habilitar potencialmente a alguien para ser profesor. No hay oposición, sólo se juzga el currículum. De esa forma la Universidad se hace trampas a sí misma».
Según las palabras del Gustavo Bueno Sánchez, profesor titular de Filosofía de la Universidad de Oviedo. Si queremos acreditarnos por la ANECA estamos al arbitrio de nuestras publicaciones en revistas de impacto. Cuando todos sabemos que publicar en dichas revistas tiene una componente muy fuerte del mal que sufre la Universidad: endogamia, burocracia, feudalismo, proteccionismo… y muy, pero que muy, poca agilidad. Solo decir que en ciencias no conozco ningún compañero al que aceptasen un trabajo suyo en menos de un año. Sin contar la docencia, si la añadimos a la ecuación…
